Deliciosa receta muy andaluza y apropiadísima en estas fechas.
- Dos botes de garbanzos.
- Un paquete de espinacas frescas.
- Dos dientes de ajo.
- Media cebolla.
- Una rebanada de pan.
- Cominos.
- Pimentón dulce o picante, según gustos.
- Aceite, vinagre y sal.
Hervir las espinacas y reservar. Freír en unas tres cucharadas de aceite de oliva, la rebanada de pan y los dientes de ajo pelados. Sacar el pan y los ajos en un mortero y majarlos junto con una cucharadita de cominos, la sal, dos cucharadas de vinagre y un poco de agua. Reservar. En el aceite de haber frito los ajos y el pan, se sofríe la cebolla muy picada a la que se le incorpora una vez blanda, la cucharada de pimentón y se remueve sin dejar que se queme. Se añaden las espinacas, se rehoga unos minutos y se añade el majado reservado y los garbanzos escurridos y lavados. Si gusta más caldoso, se puede añadir más agua. Dejar cocer unos diez minutos y servir con trocitos de pan frito y rodajas de huevo duro. ¡Me encanta!
